- En el séptimo día debemos concentrarnos en las áreas más remotas de nuestra conciencia. En la vida cotidiana contamos con este tipo de elementos, cuando observamos las nubes, u objetos lejanos, por ejemplo los árboles o sus hojas.
Para lograr que aparezca un objeto o se haga realidad un evento determinado es necesario procesar una gran cantidad de información.
Las áreas más remotas de la conciencia aseguran la mayor rapidez de la concentración. Así mientras más apartadas estén las áreas de la conciencia que usted emplea para la realización de esta tarea, más rápido será el procesamiento de la información. El conocimiento de estos hechos puede aprovecharse de la siguiente manera al usar este método. Miremos una nube con nuestros ojos u observemos una nube mentalmente y mientras tanto, construyamos, dentro de la conciencia, el evento deseado sobre esa nube, o sobre esa pequeña hoja, si es que estamos mirando una hoja desde lejos. En este caso, aprovechando las áreas más remotas de la conciencia, se pueden lograr resultados más rápidamente, y los resultados llegarán de una manera armónica, por qué la nube no es capaz de destruir, igual que la hoja no puede hacerlo. No son capaces de hacerle daño a nadie por tanto el evento se realizará de manera armónica.
- Las secuencias: de siete Dígitos: 1485321; de nueve Dígitos: 991843288
- Veremos que el mundo sigue la evolución de la imagen y el estado de nuestras acciones de acuerdo con la voluntad de Dios, para que éstas traigan la bondad universal debemos sintonizarlas con el bienestar de todos. Y entonces nuestras acciones serán más efectivas, nuestra salud mejorará y la bendición llegará a nuestra vida. La bendición a todos, a este mundo y sus criaturas es lo que nos lleva al Reino de Dios y nos guiará al lugar donde se puede obtener la vida eterna universal e individual.